El principal problema del PSOE
Con el nuevo gobierno, las cenizas que desde la aparición de las televisiones privadas han permanecido incandescentes en diversos sectores de la opinión publica, se han reavivado: la telebasura.
Resulta curioso ver como el gobierno socialista trata de demonizar todo lo que el gobierno del PP no ha hecho por la cultura... que dicho sea de paso ha sido practicamente inexistente. Digo que resulta curioso porque ese empeño en centrar las críticas de una mala gestión realizada en el ámbito cultural consigue desviar la atención que se merecen otras necesidades prioritarias como la educación, la sanidad o el empleo. Lo peor es que no son noticias por tratarse de propuestas revolucionarias que devuelvan el valor de la cultura a la posición que se merece, sino de polémicas imposiciones (casualmente todas propuestas de la SGAE) ...por el bien de la cultura..., como incomprensibles cánones en cds, prohibiciones en la posesión o distribución de software para el duplicado de los mismos... tema legalmente más que discutible puesto que en el precio de cada CD original se paga también el derecho a la copia privada {visita esta web} y recientemente esa alarmante imposición a las TV para que quiten de su programación la denominada telebasura.
No tengo ninguna duda en afirmar que los platós de las televisiones en este país se han convertido en auténticos prostíbulos donde los invitados cuentan al mínimo detalle las relaciones sexuales que tienen con el butanero de turno o el marido de su propia hermana, por no hablar de esas eternas discusiones prediseñadas con concursantes, ex-concursantes, sus respectivas madres e incluso simples candidatos de los denominados programas de telerrealidad, o los programas de testimonios donde las lágrimas de cada desgracia contada cuestan su precio en share. Personalmente no encuentro el más mínimo interés a ese tipo de espectáculos... ¿pero acaso Ramoncín ha hecho con sus discos que la música sea un arte?. Independientemente del personaje en cuestión (aquí ha quedado mi guiño anti-SGAE), sería injusto prohibir sus conciertos... aunque en este caso no puedo evitar pensar que sería una buena medida... jejeje. La realidad es que el espectador en su mayoría pide este tipo de contenidos y es en su propia casa donde cada uno puede diseñar su propia programación con apretar un botón en el mando a distancia, ¿o acaso alguien se cree que entre gran hermano y un documental sobre el imperio romano, en todos los hogares de este país existiría un debate familiar sobre todo lo que hemos heredado de aquel rico imperio en arquitectura o leyes?
El concepto de telebasura en sí mismo es bastante abstracto. Claro, propuestas como regular el contenido de unas televisiones que además no olvidemos, son privadas, me hace pensar en la pobre persona que tiene que decidir lo que es bueno para nosotros y lo que no. Podría empezar por ahorrarnos ver en televisión circos políticos tan patéticos como la que en su día se denominó Comité de investigación para la asamblea de Madrid o la que actualmente estamos viviendo con el Comité de investigación del 11M, donde como cualquier mal culebrón ya se conoce el final desde el primer día: todos tienen razón, todos ganan y todos nos hemos olvidado. O también cualquier promesa política y televisada que el paso del tiempo convierte en mentira.
Como he dicho anteriormente, tras unos años de gobierno del PP, su relevo ha alzado la bandera de lo que pretende que sea cultura de un modo excesivamente torpe y como a borregos tratan de señalarnos lo que es válido y lo que no lo es. Se trata de la torpeza de quien está consiguiendo cierto sectarismo en algo que debería agrupar todo tipo de movimientos e integración, sin imposiciones.
La televisión no es más que un aparato de entretenimiento con un simple botón que lo enciende o lo apaga y si las medidas más destacables para la educación o la cultura pasan por regular y repito, imponiendo sus contenidos, poco dicen de un gobierno que no adopta medidas importantes en la educación... ¿porque historia de las religiones y escasos programas para la educación musical, o asignaturas que ayuden a formar una opinión propia sobre la realidad?. Precisamente por no estar viendo la realidad, llevamos meses bombardeados por decisiones populistas que al menos a mí, me parecen muy decepcionantes.
Resulta curioso ver como el gobierno socialista trata de demonizar todo lo que el gobierno del PP no ha hecho por la cultura... que dicho sea de paso ha sido practicamente inexistente. Digo que resulta curioso porque ese empeño en centrar las críticas de una mala gestión realizada en el ámbito cultural consigue desviar la atención que se merecen otras necesidades prioritarias como la educación, la sanidad o el empleo. Lo peor es que no son noticias por tratarse de propuestas revolucionarias que devuelvan el valor de la cultura a la posición que se merece, sino de polémicas imposiciones (casualmente todas propuestas de la SGAE) ...por el bien de la cultura..., como incomprensibles cánones en cds, prohibiciones en la posesión o distribución de software para el duplicado de los mismos... tema legalmente más que discutible puesto que en el precio de cada CD original se paga también el derecho a la copia privada {visita esta web} y recientemente esa alarmante imposición a las TV para que quiten de su programación la denominada telebasura.
No tengo ninguna duda en afirmar que los platós de las televisiones en este país se han convertido en auténticos prostíbulos donde los invitados cuentan al mínimo detalle las relaciones sexuales que tienen con el butanero de turno o el marido de su propia hermana, por no hablar de esas eternas discusiones prediseñadas con concursantes, ex-concursantes, sus respectivas madres e incluso simples candidatos de los denominados programas de telerrealidad, o los programas de testimonios donde las lágrimas de cada desgracia contada cuestan su precio en share. Personalmente no encuentro el más mínimo interés a ese tipo de espectáculos... ¿pero acaso Ramoncín ha hecho con sus discos que la música sea un arte?. Independientemente del personaje en cuestión (aquí ha quedado mi guiño anti-SGAE), sería injusto prohibir sus conciertos... aunque en este caso no puedo evitar pensar que sería una buena medida... jejeje. La realidad es que el espectador en su mayoría pide este tipo de contenidos y es en su propia casa donde cada uno puede diseñar su propia programación con apretar un botón en el mando a distancia, ¿o acaso alguien se cree que entre gran hermano y un documental sobre el imperio romano, en todos los hogares de este país existiría un debate familiar sobre todo lo que hemos heredado de aquel rico imperio en arquitectura o leyes?
El concepto de telebasura en sí mismo es bastante abstracto. Claro, propuestas como regular el contenido de unas televisiones que además no olvidemos, son privadas, me hace pensar en la pobre persona que tiene que decidir lo que es bueno para nosotros y lo que no. Podría empezar por ahorrarnos ver en televisión circos políticos tan patéticos como la que en su día se denominó Comité de investigación para la asamblea de Madrid o la que actualmente estamos viviendo con el Comité de investigación del 11M, donde como cualquier mal culebrón ya se conoce el final desde el primer día: todos tienen razón, todos ganan y todos nos hemos olvidado. O también cualquier promesa política y televisada que el paso del tiempo convierte en mentira.
Como he dicho anteriormente, tras unos años de gobierno del PP, su relevo ha alzado la bandera de lo que pretende que sea cultura de un modo excesivamente torpe y como a borregos tratan de señalarnos lo que es válido y lo que no lo es. Se trata de la torpeza de quien está consiguiendo cierto sectarismo en algo que debería agrupar todo tipo de movimientos e integración, sin imposiciones.
La televisión no es más que un aparato de entretenimiento con un simple botón que lo enciende o lo apaga y si las medidas más destacables para la educación o la cultura pasan por regular y repito, imponiendo sus contenidos, poco dicen de un gobierno que no adopta medidas importantes en la educación... ¿porque historia de las religiones y escasos programas para la educación musical, o asignaturas que ayuden a formar una opinión propia sobre la realidad?. Precisamente por no estar viendo la realidad, llevamos meses bombardeados por decisiones populistas que al menos a mí, me parecen muy decepcionantes.
3 comentarios
jandro -
parrulo -
jandro -
Segundo, la television no es un entretenimiento de encendido y apagado, la television es un medio que crea opinion y marca tendencias, por lo tanto se debe de "vigilar", que no regular lo que se emite por la television, claro que no tiene que ser todo cultura y rollo pesado, la gente que viene agotada de trabajar no quiere comerse un rollo a las 22 de la noche, pero tampoco quiere ver la mierda de telebasura que hay hoy en dia. Se puede entretener pero sin caer en lo soez y en lo vulgar, buscando un dinero facil y dandole importancia a personajillos que no deberian tener ni medio minuto de gloria.
Respecto al canon... bueno que decir que no haya dicho, me parece patetico que un supuesto gobierno progre y que pretenda imponer soluciones modernas haya escogido la solucion mas pueril para este problema : cobrar un impuesto injusto a los consumidores.
Para acabar solo decir que la educacion no se forma solo en las escuelas, sino tambien en los hogares, por lo que la mala educacion de los niños no viene por que haya mas o menos clases de musica o religion (aunque si considero que hacen falta asignaturas que ayuden a pensar), pero la educacion parte sobre todo de las casas.
Por ahora eso es todo... he dicho :P